El trabajo a distancia es un tema del que se habla mucho, tanto si se reivindica como si se denuncia. Según el Barómetro Malakoff Humanis de Teletrabajo y Organizaciones Híbridas 2022, a finales de 2021, el 38% de los empleados teletrabajaba (8 puntos más que en 2019) y el 68% de ellos optaba por hacerlo. Los que se niegan a hacerlo tienen a veces prejuicios persistentes sobre la colaboración en el teletrabajo.
He aquí los 4 principales conceptos erróneos sobre el teletrabajo:
«Los empleados que teletrabajan son menos productivos»
Trabajar desde casa no significa necesariamente una menor productividad. Cuando se dan todas las condiciones adecuadas para el teletrabajo, la productividad general de los empleados que teletrabajan puede incluso aumentar.
Esta es una de las observaciones del último informe del Consejo nacional de la productividad (CNP) publicado en mayo de 2022. En concreto, nos dice que «las empresas que hicieron un mayor uso del teletrabajo en 2019 fueron de media más productivas y más resistentes en general a la crisis» (estudio Bergeaud A., Cette.G. y Drapala S. 2021). Por otro lado, aumentar el número de teletrabajadores en un punto incrementaría la productividad de una empresa en un 0,6%. A largo plazo, si el teletrabajo se extiende del 5% al 25% del empleo total, la empresa podría mejorar su productividad en un 9%.
La eliminación del tiempo de desplazamiento es probablemente el principal factor de productividad del teletrabajador. En efecto, permite reducir la fatiga y, por tanto, invertir este ahorro de tiempo en otras actividades. El resultado es un mejor equilibrio entre el trabajo y la vida privada que mejora el bienestar de los empleados a largo plazo.
«Generalizar el trabajo a distancia significa debilitar la colaboración»
Según el mismo informe del CNP, el teletrabajo ha hecho que las empresas sean más resistentes frente a la crisis, sobre todo gracias a su inversión en tecnología digital.
Esta es una de las principales condiciones para el éxito del teletrabajo: el entorno informático. Las empresas se han dotado de software de colaboración y herramientas de videoconferencia.
En la encuesta de Odoxa publicada en 2021, sobre una muestra de más de 2.000 franceses, sabemos que el 91% de los empleados afirma haber utilizado al menos una herramienta de videoconferencia mientras teletrabajaba. Para optimizar la colaboración, estas soluciones deben ser eficaces y ser perfectamente dominadas por los empleados. También hay que tener en cuenta su nivel de seguridad de los intercambios, así como su política de alojamiento, para evitar todos los riesgos de espionaje y robo de datos.
«El teletrabajo aísla a los empleados»
Este es el error más persistente. Cuando pensamos en el teletrabajo, inevitablemente pensamos en un empleado solo detrás de una pantalla todo el día. Sin embargo, si la empresa equipa a sus empleados con herramientas eficaces de colaboración por vídeo, los intercambios profesionales e informales entre equipos pueden ser tan fluidos como en persona.
La solución de videocolaboración de Tixeo incluye una función única que permite a los teletrabajadores reunirse en un espacio virtual abierto y chatear con sus compañeros con un solo clic.
«Trabajar desde casa dificulta la creatividad»
«Más de uno de cada dos trabajadores dice sentirse más creativo y tener mayor capacidad de innovación cuando teletrabaja«, dice un estudio de Malakoff Humanis publicado en 2021. El trabajo a distancia permite adoptar nuevas rutinas. Gracias a las herramientas de videocolaboración, el teletrabajador también puede fomentar la creatividad.
Además, el teletrabajo también significa tener la oportunidad de trabajar fuera de casa. Esta apertura a nuevos entornos permite pensar de forma diferente e innovar.
